Redacción, 02-08-2022.- Aunque a simple vista puede parecer que todos los pies son físicamente idénticos, no existen dos exactamente iguales. Los pies, formados por 26 huesos, 100 músculos y 33 articulaciones, son muy importantes:
- Nos mantienen erguidos
- Nos ayudan a mantener el equilibrio
- Evitan que nos caigamos
- Son nuestros amortiguadores
- Son los primeros en absorber cualquier impacto que llegue del suelo.
Clasificación anatómica
En esta primera clasificación se tiene en cuenta la altura del arco plantar.
Tal y como recoge La Nueva España, es la estructura que soporta nuestro cuerpo y es de vital importancia, ya que permite saber qué tipo de zapato es mejor. También es muy útil para prevenir lesiones muy frecuentes, como la fascitis plantar, que es una de las causas más comunes del dolor de talón, sobre todo en corredores y personas con sobrepeso. Aparece generalmente con los primeros pasos de la mañana, y el dolor va disminuyendo a medida que va avanzando el día. Para evitar complicaciones que puedan dificultar las actividades cotidianas, conviene no ignorar los síntomas de esta patología.
Por tanto, según su anatomía, hay diferentes tipos de pie:
- Pie plano. El arco tiene muy poca o ninguna altura.
- Pie cabo. A diferencia del anterior, este pie se caracteriza por una bóveda plantar con mucha altura.
- Pie normal. La altura del arco plantar es promedio.
Según señalan los podólogos manchegos, “en los dos primeros casos la presión plantar se distribuye de forma diferente, sobrecargando algunas zonas y haciendo que el simple hecho de caminar suponga mucho esfuerzo. El tratamiento suele consistir en la realización de ejercicios, el uso de plantillas personalizadas y, si es necesario, una operación”.
No se debe confundir con la huella plantar, que determina tanto la manera de caminar como la eficiencia de la marcha. Es un factor determinante para conocer la morfología del pie y se distinguen entre correcta, planas (cuando la totalidad del pie contacta con suelo y se carece de arco longitudinal) y cavas (la mayor parte de la carga la sostiene la parte interna del pie). Este tipo de huella plantar tiende a tener una mayor probabilidad de padecer hiperqueratosis, que comúnmente se conoce como dureza en aquellas zonas donde más fuerza se ejerce.
Clasificación según la longitud del primer metatarsiano
- Index minus. El primer metatarsiano (dedo gordo del pie) es más corto que el segundo. Las personas con Index minus son propensos a las sobrecargas y los juanetes.
- Index plus. A diferencia del anterior, el primer metatarsiano es más largo que el segundo. Se pueden desarrollar trastornos como sesamoiditis (dolor en el hueso del primer metatarsiano) o Hallux Rigidus, una patología que causa dolor y rigidez.
- Index plus minus. Ambos son iguales.