Redacción, 28-04-2023.- Con la llegada de la primavera, la alteración de las temperaturas, el aumento de la exposición a la luz solar y el cambio horario pueden causar efectos físicos y emocionales en algunas personas.
Fatiga, somnolencia, insomnio, ansiedad, falta de energía, falta de apetito, tristeza, disminución de la libido o dificultad para concentrarse son algunos de los síntomas que pueden experimentar quienes sufren lo que se conoce como astenia primaveral.
“Estos cambios ocasionan desajustes en los ciclos hormonales, los cuales son canalizados por el hipotálamo, la glándula del cerebro encargada de regular el sueño, el apetito o la temperatura corporal, entre otros. Para disminuir los síntomas es aconsejable llevar a cabo una dieta que sea equilibrada y variada, que aporte los nutrientes y la energía necesaria para sobrellevar esta época”, explica Cristina Morillo, nutricionista de BluaU de Sanitas.
Sanitas ha elaborado un listado con recomendaciones nutricionales:
Hidratación:
Mantener un nivel correcto de hidratación es muy importante de cara a combatir la astenia primaveral. Evitar la ingesta de bebidas alcohólicas y reservar los refrescos para ocasiones especiales.
Aguacate:
Es un alimento imprescindible para combatir este trastorno debido su gran cantidad de vitaminas, alto valor nutricional y su aporte de grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, esenciales para el buen funcionamiento metabólico y el control del colesterol.
Chocolate negro:
Es capaz de incentivar el sistema nervioso central y mejorar el estado de ánimo, algo relevante ya que la tristeza es uno de los síntomas más comunes de la astenia primaveral.
Dátiles:
Proporcionan una buena cantidad de ácido fólico, magnesio, hierro y vitamina B3.
Espárragos blancos y verdes:
Aportan numerosos nutrientes al mismo tiempo que proporcionan una gran dosis de fibra y antioxidantes. Ayudan a recuperar fuerzas y a estar más positivos gracias a que son ricos en vitaminas C y E.
Fresas:
Ayudan a fortalecer el sistema inmunitario y aportan ácido fólico, vitamina C y minerales (magnesio y cobre).
Frutos secos:
Proporcionan gran cantidad de grasas saludables, aminoácidos y vitaminas que dotan de energía al organismo.
Pescado azul:
Este nutriente ayuda a que los niveles de serotonina se mantengan estables combatiendo la depresión y mejorando el estado de ánimo.
Plátano:
Aporta múltiples beneficios tales como el triptófano (conocido por ser un antidepresivo natural), la fibra, los minerales o el potasio. Además, se trata de un producto muy energético.