Redacción, 01-12-2022.- Como siempre, traigo bichos de temporada y es que si alguien está de moda hoy es el virus respiratorio sincitial (VRS). El 80% de las urgencias en atención primaria y hospitales están relacionadas con la bronquiolitis, mientras la curva de contagios ya empieza a vaciar algunas escuelas infantiles Pero esperad, que os cuento qué es y cómo actúa este VRS.
¿Qué es la bronquiolitis?
La bronquiolitis tiene una definición muy académica: «Primer episodio de dificultad respiratoria en el menor de 24 meses». Esto querría decir que solo podríamos tener bronquiolitis una vez y que todo lo demás serían bronquitis.
Tal y como recoge Diario Sur, en la práctica los pediatras reconocemos que estas bronquitis de vía pequeña en niños chiquititos tienen unas características propias en cuanto a su presentación, su auscultación y su tratamiento, es por eso que muchas veces seguimos llamando bornquiolitis a las bronquitis en el menor de 24 meses aunque ya haya sufrido varios episodios.
Guerras académicas a parte lo que va a ocurrir en una bronquiolitis es que se va a producir un engrosamiento de la mucosa de los bronquiolos, las vías pequeñas que conducen el aire en el interior de los pulmones, además se va a producir acúmulo de moco a estos niveles lo que va a llevar a una obstrucción de estas vías.
Pero, ¿qué lo produce?
Pues como casi todo en pediatría vamos a echarle la culpa a los virus. Muchos virus pueden causar esto pero existe una estrella indiscutible: el VRS (virus respiratorio sincitial).
¿Cuál es el tratamiento de la bronquiolitis?
Pues esto es lo peor, no existe un tratamiento bueno para la bronquiolitis. De hecho los últimos consensos solo reconocen la utilidad de los lavados nasales y el oxígeno en los casos en que sea necesario.
En casa lavaremos la nariz, incorporaremos al bebé cuando este tumbado unos 30º, fraccionaremos las tomas (damos más frecuentemente y en menor cantidad) y evitaremos la exposición a humo de tabaco (esto debería suceder siempre). Nada más.