Redacción, 11-08-2021.-Nos encontramos en la época más calurosa del año y la exposición a altas temperaturas sin la correcta hidratación puede provocar serios problemas en nuestra salud como puede ser un golpe de calor. Se trata de un trastorno causado por la elevación excesiva de la temperatura corporal causada por la exposición prolongada o realización de actividad física a altas temperaturas.
El golpe de calor es la forma más grave de lesión por calor, por lo que hay que tener especial cuidado con los niños, ya que son los más vulnerables.
Tal y como recoge Quirónsalud, la exposición a altas temperaturas y a la humedad puede provocar alteraciones en el sistema de regulación térmica provocados por la falta de hidratación y la pérdida de sales minerales que contribuyen al correcto funcionamiento de los órganos vitales.
Cómo actuar ante un golpe de calor
- Trasladar a la persona a un lugar con sombra o ventilado.
- Quitar el exceso de ropa que pueda llevar.
- Si es posible, enfriar a la persona con una ducha de agua fría, si no, refrescarla con toallas húmedas o compresas de hielo en cabeza, cuello, axilas y pecho.
- Si el afectado está consciente, intentar que beba agua fría.
Los golpes de calor pueden evitarse siguiendo unas pautas en días especialmente calurosos o ante la realización de ejercicio al aire libre:
- Hidratarse continuamente. En el caso de los niños, ofrecerles agua, aunque ellos no lo pidan, especialmente si van a realizar una actividad física prolongada.
- Evitar realizar ejercicio o exponerse al sol en las horas más calurosas. Si no puede evitarse, realizar descansos en lugares frescos e ingerir mucho líquido.
- Usar ropa transpirable y holgada que permita al cuerpo enfriarse. Es recomendable el uso de gorros y crema solar para una mayor protección.
- No dejar nunca a nadie, sea niño o adulto, en un vehículo estacionado, aunque tenga las ventanillas bajadas. La temperatura en estos casos puede llegar a elevarse más de 6ºC en 10 minutos.