Redacción, 06-02-2024.- En el contexto del Día Mundial contra el Cáncer, que se conmemora el próximo domingo, oncólogos del grupo sanitario Ribera han recordado la importancia del ejercicio físico regular, en concreto el de bajo impacto, y sus beneficios para mejorar la calidad de vida de los pacientes, así como para prevenir la aparición de esta enfermedad y ayudar a su recuperación.
“El ejercicio físico resulta muy beneficioso para las personas que han sido diagnosticadas de cáncer, tanto para la tolerancia al tratamiento como para su recuperación y mejora de la calidad de vida, a su vez contribuyendo a la prevención de la enfermedad en la población sana”, asegura el doctor José Balsalobre, oncólogo del hospital Ribera Virgen de la Caridad (Cartagena).
Los especialistas del grupo Ribera consultados confirman los efectos positivos de la actividad física en pacientes oncológicos en tratamiento y también como factor que ayuda a prevenir la enfermedad.
“Los beneficios del ejercicio en estos pacientes son múltiples”, explica la doctora Magda Palka, oncóloga del Hospital Universitario de Torrejón.
El doctor Balsalobre añade a los efectos positivos ya citados otros como mejores índices de supervivencia y menor riesgo de recaída, mejora la movilidad, el sistema inmunológico y la función cardiovascular y multitud de beneficios asociados con la salud mental del paciente oncológico, según Ribera.