Redacción, 16-12-2022.- La Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), con motivo del Día Mundial de la Disfagia, que se celebra hoy, 12 de diciembre, reivindica la importancia de un diagnóstico precoz de la enfermedad por su elevada prevalencia y su repercusión en la salud, especialmente en las personas ancianas.
La disfagia es la dificultad para tragar, es decir, para que el bolo alimenticio pase desde la boca hasta el estómago, en cualquier parte de este recorrido. Puede suceder con alimentos sólidos y líquidos. Se distinguen 2 tipos, según la causa: la disfagia neurológica, en la que se altera la función de los músculos implicados en la deglución, y la mecánica, por algún tipo de obstrucción o dificultad de tránsito a lo largo de ese recorrido del bolo.
La Dra. María Riestra, miembro del Área de Nutrición de la SEEN, indica que existen muchas patologías que pueden causar disfagia, aunque las más frecuentes son las neurológicas y las oncológicas.
“La mitad de las personas que ha sufrido un ictus sufrirá disfagia. Algunos problemas neurológicos, como la demencia, la enfermedad de Parkinson o las enfermedades neurodegenerativas pueden desencadenar también problemas de disfagia. Los tumores de la región de la cabeza o el cuello suelen provocarla en algún momento, así como los tumores del esófago, no solo por el propio tumor sino también por algunos tratamientos como la radioterapia”, explica la doctora Riestra.