Redacción, 23-07-2023.- El verano es una época de cambios derivados por las altas temperaturas, en la alimentación, en las rutinas, incluso cambio de residencia en algunos casos.
Según advierte el doctor Manuel Baca, jefe del Servicio de Pediatría y Neonatología del Hospital Quirónsalud Málaga, el niño es muy sensible a los cambios, por lo que el verano es una época en la que hay que estar especialmente pendientes a los más pequeños y cumplir con una serie de recomendaciones para ello.
El pediatra empieza incidiendo en la importancia de estar hidratados y beber líquido, especialmente agua, constantemente.
«La composición del niño es fundamentalmente líquido, con lo cual es muy importante que en todo momento el niño beba líquidos para evitar esta deshidratación, incluso aunque no tenga sed».
En segundo lugar, es muy importante la vigilancia sobre el niño, según recoge Quirónsalud.
«Desgraciadamente, cada año nos enfrentamos al drama tan importante de los ahogamientos. El niño no debe estar solo bañándose sin alguien pendiente de él y, siempre que sea posible, que haya una cancela con puerta cerrada para que el niño no pueda acceder de manera independiente a la piscina», destaca el experto