Redacción, 19-12-2021.- El esquí – snowboard – y el patinaje sobre hielo son dos de los deportes de invierno que más se ejercitan en España, por lo que resulta conveniente que sus aficionados conozcan los tipos de lesiones a las que están expuestos.
Además, al ejecutarse en condiciones meteorológicas adversas -bajas temperaturas, humedad, hielo, nieve dura…- para una práctica 100% segura son necesarios una adecuada preparación física, una buena técnica, tanto en su desarrollo como en las caídas, y un equipamiento especial.
Según detalla el Dr. Marco Antonio Strocchia, del equipo Traumatología EQAL del Hospital Nuestra Señora del Rosario (HNSR), “son relativamente comunes las lesiones, provocadas, generalmente, por gestos incorrectos o malas prácticas. Las más graves se centran en las extremidades inferiores, sobre todo en las rodillas, la parte del cuerpo que más presión soporta en su ejercicio. Las más frecuentes son las de ligamento cruzado anterior y los esguinces de los ligamentos colaterales. También son habituales las que afectan a los hombros y las manos, así como las relacionadas con la velocidad y la intensidad de la práctica, que pueden conllevar traumatismos craneoencefálicos y lesiones de la columna vertebral”.
Lesiones comunes en los deportes de invierno, según el HNSR:
- Lesiones de rodilla
- Luxación de hombro
- Fracturas
- Esguinces
Prevención de lesiones en deportes de invierno:
- Cuidar las comidas, la hidratación y llevar algún alimento -barra energética o frutos secos- que ayude a reponer energía.
- Preparación física. Es importante que los músculos y demás tejidos blandos estén preparados para afrontar el esfuerzo que se les va a exigir.
- Usar el material deportivo correcto para cada fisiología. Ya sean patines, esquíes, tablas o palos hay que asegurarse de escoger acertadamente. Dar unas clases para aprender a manejarse y caer correctamente también puede ser muy útil.
- Usar casco de protección, pues las lesiones en la cabeza son la causa más habitual de ingreso hospitalario y el motivo más común de fallecimiento.
- Descansar lo suficiente, lo que también está relacionado con la preparación física.
- Vigilar la velocidad. “Esto es como conducir un coche: si vas a tener un accidente, mejor que sea a poca velocidad que yendo deprisa. En gran medida, las consecuencias de una caída van a depender de la velocidad. Actúa siempre con cabeza y vigila tu alrededor”, advierte.
- Protegerse la piel con filtros adecuados y utilizar gafas con pantalla de rayos UVA para evitar quemaduras en piel y córneas. La radiación ultravioleta aumenta con la altura e incrementa el reflejo de la luz en la nieve, la cual, como ocurre con el hielo, refleja más del 85% de la radiación que recibe.
- Finalmente, acatar las normas. Para prevenir lesiones, no hay que salirse de los caminos establecidos ni empeñarse en efectuar saltos con montañas de nieve improvisadas. Vigilar el estado de la nieve por la mañana y planear el esfuerzo en función del nivel de cada uno