Redacción, 04-06-2022.– No somos conscientes de la importancia que tienen las hormonas en nuestro organismo y nuestra salud.
Como subraya el doctor Alberto Fernández, secretario de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), «los desequilibrios hormonales son frecuentes y, en ocasiones, insuficientemente comprendidos».
Tal y como recoge La Nueva España, las hormonas son mensajeros biológicos, unas moléculas producidas por nuestro propio cuerpo por las glándulas del sistema endocrino (la pituitaria, la tiroides, las paratiroidales, el timo y las glándulas adrenales).
Una vez que estas moléculas son liberadas a la sangre, se desplazan hasta llegar a diferentes tejidos y órganos. Ahí se encargan de controlar numerosas funciones e intervienen en procesos como el crecimiento y desarrollo, el metabolismo y la reproducción.
Por eso, tal y como explica el doctor Raúl Luque, vocal de la (SEEN) «si ocurre una carencia o un exceso en la producción de hormonas, el desajuste en el organismo es inmediato. Por eso, hay que evitar que nuestro organismo produzca y libere estas hormonas de manera descontrolada, provocando la aparición de problemas de salud graves, aunque afortunadamente en la actualidad, los profesionales endocrinos disponemos de tratamientos terapéuticos destinados a paliar estos desequilibrios hormonales».
¿Qué problemas puede provocar un desajuste hormonal?
Los problemas de salud que provocan van a ser diferentes en función del tipo de hormona que esté alterada y del tiempo que dure el trastorno. Porque hay que tener en cuenta que se han identificado más de 60 tipos de hormonas, y entre las más conocidas encontramos:
- La adrenalina,
- la oxitocina,
- la testosterona,
- la serotonina,
- el estrógeno
- la insulina.
Y el exceso o la falta cada una de ellas tiene distintas consecuencias.
El doctor Luque pone varios ejemplos: «un ejemplo son las anomalías en la producción de hormonas hipofisarias como es el caso de la acromegalia, una enfermedad endocrina poco frecuente producida por un tumor que provoca un exceso de producción de hormona de crecimiento (GH)».