Redacción, 29-07-2022.- El tiempo medio que transcurre desde que un nuevo medicamento recibe la autorización en Europa hasta que está disponible para su uso en España es de 517 días, más de 17 meses de demora. Además, entre 2017-2020 sólo estaban disponibles en el Sistema Nacional de Salud (SNS) 85 de los 160 fármacos aprobados en la Unión Europea, es decir, el 53%. Son datos el informe anual W.A.I.T. Indicator, elaborado por la consultora Iqvia.
Tal y como recoge ABC, el retraso en la aprobación y la disponibilidad en España se refleja también en áreas de especial gravedad para los pacientes como la Oncología y las enfermedades raras. En ellas se han concentrado en los últimos meses las demandas de solución por parte de profesionales sanitarios y organizaciones de pacientes.
Por este motivo, Farmaindustria, la Asociación Nacional Empresarial de la Industria Farmacéutica establecida en España que agrupa a la gran mayoría de las compañías farmacéuticas innovadoras, ha hecho una serie de propuestas específicas al Ministerio de Sanidad.
El nuevo documento de Farmaindustria recoge las propuestas presentadas a la Administración para revertir el deterioro en los indicadores de acceso a la innovación. Este informe, bajo el título El acceso a los medicamentos en España: diagnóstico y recomendaciones, describe la situación actual, presenta un análisis de las causas y reúne una serie de medidas para atajar los principales problemas identificados.
«El empeoramiento del acceso a los medicamentos innovadores en España en los últimos años está dañando seriamente la calidad, efectividad, cohesión y equidad en el SNS. El principal perjuicio es para los pacientes, que no pueden acceder a los tratamientos de mayor eficacia o lo hacen con un gran retraso o en condiciones restringidas -explica Juan Yermo, director general de Farmaindustria-. Pero hay un segundo impacto, también importante, para la investigación biomédica en nuestro país, ya que las compañías farmacéuticas pueden perder su interés en invertir en el país si no ven salida a sus medicamentos innovadores».
La llegada de un medicamento innovador es una nueva esperanza para las personas enfermas
Esta segunda consecuencia puede impactar principalmente en los ensayos clínicos, área en la que España es un referente mundial. «El empeoramiento del acceso en el país afecta, por lo tanto, a la contribución del sector al crecimiento económico», subraya el documento.
La llegada de un medicamento innovador es una nueva esperanza para las personas que padecen una enfermedad y no disponen de un tratamiento todavía, y también para aquéllos que, aun teniendo alguna opción terapéutica, pueden ver mejoradas sus expectativas de curación o de aumento de calidad de vida.
España tiene un acuciante problema de acceso a los medicamentos innovadores, que requiere una solución urgente, porque se están poniendo en riesgo la salud y el bienestar de los pacientes y se está incurriendo en costes sanitarios y no sanitarios que podrían ahorrarse gracias a los nuevos medicamentos.