Redacción, 27-03-2025.- En los últimos años, especialmente tras el confinamiento por la pandemia, el teletrabajo se ha ido consolidando en una gran parte de los entornos laborales, sobre todo en los de oficina. Sin embargo, una de las mayores desventajas de trabajar desde casa es la significativa reducción de la exposición a la luz solar, lo que impacta directamente en los niveles de Vitamina D3 en el organismo. Esta vitamina, fundamental para el desarrollo y el buen funcionamiento del cuerpo, se sintetiza principalmente a través de la piel cuando esta se expone a la radiación ultravioleta del sol.
El 40% de la población española menor de 65 años tiene niveles bajos de vitamina D.
“Este dato puede parecer sorprendente, sobre todo considerando que España es un país soleado, y resulta preocupante porque esta vitamina cumple funciones esenciales en el cuerpo, mucho más allá de la salud ósea. Interviene en la modulación del sistema inmune, en los trastornos del estado de ánimo, en la fortaleza y resistencia muscular, y se relaciona con algunas enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, la hipertensión, problemas cardiovasculares y algunas enfermedades autoinmunes”, explica la Dra. Ana I. Ortiz, gerente del área de Salud del Grupo Farmasierra.
Tal y como recoge Farmasierra, y es que a pesar de que esta vitamina la obtenemos fundamentalmente a través de la incidencia de la luz solar y en un porcentaje mucho menor a través de la alimentación, los niveles adecuados no siempre están garantizados, lo que hace que su suplementación sea una alternativa necesaria y efectiva para muchas personas. En un contexto donde el teletrabajo puede conllevar un estilo de vida más sedentario y una menor exposición a la luz solar, mantener una cantidad suficiente de Vitamina D3 es una cuestión clave.