Redacción, 23-04-2022.- Quien más quien menos ha experimentado alguna vez una sensación de mareo al acostarse. De repente, parece que todo da vueltas a nuestro alrededor mientras permanecemos tumbados. Y muchas de las personas que padecen esta sensación se preocupan porque temen estar desarrollando alguna enfermedad importante. La realidad es que en la mayor parte de los casos afortunadamente no se trata de nada demasiado serio. Lo más común es que se trate de vértigo postural paroxístico benigno (VPPB). Es decir, se trata de un trastorno del oído interno cuyo principal síntoma es la aparición de mareos y náuseas. Esto sucede al mover la cabeza, lo que provoca que los otolitos, unas partículas que se hallan en la parte de atrás del oído, se muevan y confundan al cerebro que nos transmite la sensación de que todo se mueve en nuestro entorno.
Tal y como recoge La Vanguardia, el VPPB es una de las causas más frecuentes del vértigo, esa sensación que nos aparece de repente cuando movemos la cabeza en ciertas circunstancias y hace que parezca que todo lo que tenemos alrededor nos de vueltas. Suelen ser episodios de corta duración con mareos de distinta intensidad. Uno de los momentos en que aparece esta sensación de mareo es cuando estamos acostados y nos incorporamos con rapidez. Este tipo de vértigo no es habitualmente una dolencia grave, pero no hay que minusvalorarlo, ya que puede provocar caídas.
La enfermedad de Ménière
Hay diversas causas que provocan este desplazamiento de los otolitos, un proceso que es más frecuente a partir de los 50 años. Cuando aparece en personas más jóvenes, es probable que se deba a haber sufrido un golpe en la cabeza o algún tipo de lesión. Otra de las causas puede ser el hecho de sufrir migraña con cierta frecuencia. También es posible que se deba a la aparición de un virus que afecta al oído interno. O que este vértigo sea causado por la enfermedad de Ménière, que provoca trastornos en el oído interno que alteran el equilibrio y puede causar sordera, vértigo y ruidos en el oído.