“El uso de lentillas tanto es piscina como en el mar no es nada recomendable, ya que aumenta el riesgo de infecciones bacterianas, potencialmente graves, como pueden ser las Acanthoamebas. También incrementa el riesgo de queratitis y otros síntomas irritativos por la sal del mar o tocarnos con las manos sucias”, explica la Dra. Amina El Rubaidi, cojefa del Servicio de Oftalmología de los hospitales universitarios Sanitas La Zarzuela y Virgen del Mar.
Igualmente, la experta apunta que en verano pueden aumentar los síntomas compatibles con ojo seco por uso y abuso de aire acondicionado, uso de pantallas en el tiempo libre y conjuntivitis de tipo alérgico al realizar más actividades al aire libre.
Para evitar estos y otros problemas oculares, los expertos de Sanitas han elaborado un listado una serie de precauciones a tener en cuenta en esta época:
• Usar gafas de sol:
• Utilizar gafas de baño:
con sustancias irritantes como el cloro y con contaminantes como virus y bacterias. Esto
ayudará a prevenir infecciones y molestias oculares.
• Tener cuidado con el aire acondicionado:
• Lavarse las manos frecuentemente:
• Mantener los ojos hidratados y limpios:
limpiar con abundante suero fisiológico y poner, posteriormente, lágrimas artificiales.