Redacción, 27-01-2017.- Estar delgado no es sinónimo de estar sano. De hecho, en la última década se ha caracterizado la existencia de individuos «falsos delgados». Se trata de personas que tienen un peso normal de acorde a su estatura, pero que presentan características relacionadas con la obesidad, como deposición de grasa visceral, y un mayor riesgo de padecer diabetes mellitus tipo 2 y enfermedad cardiovascular.
El grupo de investigación en Nutrigenómica y Obesidad de la Universidad de las Illes Balears, liderado por el doctor Andreu Palou, junto con la doctora Paula Oliver, lleva años caracterizando el fenotipo falso delgado y buscando biomarcadores tempranos de riesgo metabólico. Estos estudios se han llevado a cabo como parte de las líneas de investigación del CIBEROBN al que pertenece el grupo, y están incluidos en la tesis doctoral del doctor Rubén Díaz-Rúa que ha sido defendida recientemente.
El grupo de Palou ha demostrado por primera vez que la ingesta de una dieta desequilibrada rica en grasas incrementa la expresión de una proteína, la KRT23, en el hígado de los animales con fenotipo falso delgado. Esta proteína ha sido descrita como marcador de enfermedad hepática en humanos (esteatohepatitis y progresión a hepatocarcinoma).