Redacción, 15-01-2016.- Morderse las uñas es un mal hábito que, en la mayoría de los casos, se desarrolla en la niñez, a veces, por imitar el comportamiento de los padres. Según este estudio desarrollado por Ipsos a nivel europeo, una de cada cuatro personas se muerde las uñas. Esta cifra alcanza los 7 millones de personas en España, el 15% de la población. Los hombres se las muerden más que las mujeres: el 29% de los hombres en contraposición con el 21% de las mujeres. En cuanto a la edad, el porcentaje más elevado se comprende entre los 21 y los 25 años, con un 42%.
Según la Dra. Aurora Guerra, Jefa de Sección de Dermatología del Hospital Universitario 12 de octubre de Madrid y Fundadora del grupo de dermatología psiquiátrica de la AEDV, “se trata de un trastorno del control de los impulsos, encuadrado en el grupo de los movimientos repetitivos sobre el cuerpo. Puede ser una acción consciente y ritual, o inconsciente, que necesita un apoyo para su corrección. Éste debe ser doble: por una parte creando aversión a la tendencia a morderse las uñas, y por otra premiando el esfuerzo cuando se consiga evitarlo”.
Morderse las uñas es un hábito poco estético
Este trastorno nervioso, además de dar mala imagen, es un hábito anti higiénico. En las manos y uñas hay muchos patógenos. Las personas que se muerden las uñas se llevan estos patógenos a la boca, esparciendo las bacterias y los virus a la membrana de mucosa de la boca.
La solución, un tratamiento eficaz, con resultados visibles a corto plazo.
Abandonar este hábito ahora es más sencillo gracias a un innovador tratamiento: Raylex, un producto con una combinación única de:
- Extracto de pomelo
- Denatonio, la sustancia más amarga del mundo que interrumpe el reflejo de morderse las uñas y convierte un hábito inconsciente en uno consciente.
Gracias a su formato en forma de rotulador puede aplicarse en cualquier momento y con una sencilla dosificación, a diferencia del tradicional esmalte.
Raylex nutre y favorece el crecimiento de las uñas gracias a uno de sus ingredientes, la biotina. Además no aporta brillo por lo que pueden usarlo tanto hombres como mujeres.
Para acabar al fin con este hábito tan negativo, es recomendable aplicar regularmente Raylex dos veces al día y que el tratamiento se continúe hasta al menos 18 días.