Redacción, 15-04-2015.- Los tratamientos de larga duración de la esquizofrenia suelen utilizarse para una fase de mantenimiento y se asocia al incumplimiento de la terapia oral pero, en la práctica clínica, está aumentando su uso y cada vez en estadíos más precoces.
«Se utilizan cada vez más», según ha reconocido José Villagrán, coordinador de la Unidad de Hospitalización Psiquiátrica de la Unidad de Gestión Clínica del Hospital de Jerez (Cádiz), durante una mesa redonda con motivo del simposio de Psiquiatría ‘En busca de una mejor autonomía’ celebrado en Cádiz.
Este experto reconoce que entre los motivos de este mayor uso está el que actualmente se tiene de una medicina o estilo prescriptivo más individualizado en donde se debe valorar en cada caso las características individuales del paciente, así como sus antecedentes o experiencia con los psicofármacos, la presencia de otras patologías o fármacos concurrentes, o sus peculiaridades farmacocinéticas.