Redacción, 10-07-2018.- Viajar puede alterar la rutina que nos hacen perder los hábitos de higiene dental y favorecen la formación de caries y enfermedades periodontales, los viajes en avión o el buceo pueden alterar la salud bucodental.
Los cambios bruscos de presión atmosférica pueden ocasionar fuertes dolores en los dientes. En el ámbito facultativo, a este fenómeno se le conoce como barodontalgia y sucede porque el tejido que rodea la corona del diente no se adapta al cambio y presiona desde el interior, provocando un dolor que puede variar entre una molestia leve y un dolor muy fuerte que nos maree y perdamos el conocimiento.Estos efectos, propios de los viajes en avión o de las inmersiones acuáticas, “suelen ser reversibles de forma espontánea, siempre y cuando los dientes no presenten problemas de caries o molestias previas”, informa Manuela Escorial, odontóloga de la Dirección Asistencial de Sanitas Dental.
Actividades como el buceo también supone otros riesgos. La Federación Mundial Dental (FDI, por sus siglas en inglés) clasifica este deporte como el segundo que mayores traumatismos orales ocasiona. Esto se debe al conocido „síndrome del buzo‟ que, tal y como explica la doctora Escorial, está asociado al uso de boquillas estandarizadas en los equipos de buceo, “para poder mantener el dispositivo en boca, el buceador genera un desequilibrio entre su forma de morder y el sistema neuromuscular. Esta situación conduce a un sobreesfuerzo de la articulación temporomandibular y de la musculatura que acaba produciendo dolor y molestias en la función normal”.
Cuando viajas es frecuente recurrir a un estuche de viaje para guardar el cepillo de dientes, pero muchas veces no se utiliza correctamente. Se trata de un elemento diseñado para transportar el cepillo y no para guardarlo indefinidamente.Un ambiente cerrado y húmedo puede estimular el crecimiento de bacterias, por lo que hay que dejar que el cepillo se seque al aire sin tocar ninguna superficie, esto incluye el lavabo y las zonas colindantes.
Además, antes de realizar un viaje se recomienda visitar al dentista, este puede remediar algún problema que aún no se ha identificado y prevenir dificultades posteriores.