Redacción, 09-01-2015.- Investigadores han desarrollado un bioimplante que abre el camino a nuevos tratamientos para personas paralizadas tras una lesión de la médula espinal. Este dispositivo, que se aplica directamente a la médula espinal sin dañarlo, ha conseguido restaurar el movimiento voluntario en ratas paralizadas, combinando estimulación eléctrica y química.
Científicos de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL), en Suiza, han conseguido que ratas paralíticas caminen de nuevo por su
cuenta usando una combinación de estimulación eléctrica y química. La aplicación de este método a los seres humanos requiere implantes
multifuncionales que se podrían instalar durante largos periodos de tiempo en la médula espinal sin causar ningún daño a los tejidos, un avance que han desarrollado los equipos de los profesores Stéphanie Lacour y Grégoire Courtine.
Su implante ‘e-Dura’ está diseñado específicamente para colocar en la superficie del cerebro o la médula espinal, imita estrechamente las propiedades mecánicas de los tejidos vivos y puede administrar simultáneamente impulsos eléctricos y sustancias farmacológicas. Con este pequeño dispositivo, los riesgos de rechazo y/o daños a la médula espinal se reducen drásticamente, como se detalla en un artículo que se publicará a principios de este mes en ‘Science’.