Redacción, 10-10-2022.– El Vall d’Hebron Instituto de Investigación (VHIR) de Barcelona ha identificado un «interruptor» epigenético con capacidad de bloquear el proceso de metástasis del neuroblastoma, un cáncer pediátrico que provoca el 15 % de los fallecimientos de niños oncológicos.
Tal y como recoge El Mundo, este estudio en modelos animales del grupo de Cáncer y Enfermedades Hematológicas Infantiles del VHIR, que ha contado con la colaboración del IRB Barcelona y el IDIBELL, abre la puerta a nuevas terapias que paralicen el proceso de metástasis. El neuroblastoma es una enfermedad poco común pero altamente agresiva, que representa entre el 8 y el 10% de todos los cánceres infantiles y el 15% de todas las muertes en pacientes oncológicos pediátricos.
Afecta principalmente a niños menores de cinco años y se origina en células nerviosas inmaduras que se encuentran en varias áreas del cuerpo, siendo más frecuente en las glándulas suprarrenales (encima de los riñones), aunque también pueden aparecer en otras áreas del abdomen, en el tórax, el cuello o cerca de la columna vertebral.
Cada vez más evidencias apuntan a que, en el desarrollo y progresión del tumor, juega un papel importante las alteraciones del epigenoma, el encargado de determinar la expresión de los genes. El material genético de un organismo está condicionado por una serie de compuestos químicos, el epigenoma, que actúan como si fueran «interruptores», ya que modifican o marcan lo que debe hacer el genoma.