Redacción, 20-02-2024.- La inclusión del probiótico Bifidobaceterium breve CECT8242 y ácidos grasos omega-3 son capaces de ayudar a prevenir el daño cerebral que ocasiona una dieta rica en grasas y que está asociado con el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas, entre ellas la enfermedad de Alzheimer. Esta es una de las conclusiones que se extrae de un estudio coordinado desde la Universitat de Lleida y el Instituto de Recerca Biomédica de Lleida (IRBLleida) e impulsado y financiado por Laboratorios Ordesa.
Los resultados de este estudio han sido publicados en la revista Antioxidants.
Este estudio también ha demostrado, por primera vez, que la dieta influye en las modificaciones cerebrales de los mamíferos y ha servido para identificar el mecanismo que ocasiona el daño cerebral que se asocia posteriormente con el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas.
“Existen diversas vías metabólicas que se cree que pueden estar relacionadas con el daño oxidativo de las proteínas cerebrales. Gracias a este estudio hemos visto que la oxidación lipídica es el mecanismo que lo produce”, comenta el Dr. Manuel Portero-Otín, profesor de Fisiología de la Universitat de Lleida e investigador del Institut de Recerca Biomédica de Lleida (IRBLleida), uno de los coordinadores del estudio.
Revertir los efectos de las dietas ricas en grasas
La obesidad durante la infancia se ha convertido en una pandemia y está relacionada principalmente con dietas ricas en azúcares y ácidos grasos, teniendo importantes consecuencias tanto en la salud como en el desarrollo, destacando sobre todo las posibles implicaciones en el riesgo de aparición en el futuro de enfermedades neurodegenerativas.