Redacción, 25-02-2023.- El periódico «OK Diario» entrevista a la coordinadora del Grupo de Estudio de Conducta y Demencias de la Sociedad Española de Neurología (SEN) y jefe de Servicio del Hospital Clínico de Barcelona la doctora Raquel Sánchez del Valle, sobre los nuevos test de detección precoz del alzheimer.
Compartimos con ustedes algunas de las cuestiones más relevantes:
Pregunta.- ¿En qué consisten esos nuevos test de detección temprana en sangre del Alzheimer? ¿Es posible el diagnóstico con muchos años de antelación?
Respuesta.- Lo que actualmente está en investigación y desarrollo es buscar pruebas en sangre que puedan dar resultados similares a las que obtenemos normalmente con las otras pruebas médicas. Al ser mediante extracción de una muestra de sangre, estas pruebas resultarían mucho más simples y también más accesibles ya que no necesitarían del apoyo de un equipo médico ni de una herramienta como el PET.
Ya sabemos que los cambios en el cerebro de un paciente con Alzheimer empiezan unos 15 o 20 años antes de que se inicie la sintomatología, si tenemos un marcador que nos pueda reflejar que esto está pasando, podemos adelantarnos al diagnóstico antes de la sintomatología. Por lo tanto, sí es posible detectar la enfermedad con antelación gracias a estos test pero con algunas limitaciones.
«Los cambios en el cerebro de un paciente con Alzheimer empiezan unos 15 o 20 años antes de que se inicie la sintomatología»
P.- ¿Recientemente se han presentado nuevos test que están pendientes de ser aprobados por la UE?
R.- Ya hay dos generaciones de este tipo de test en el mercado. La primera generación tiene el marcaje UE, pero, recientemente, la normativa ha cambiado y tienen que volver a ser aprobados, algo que se espera ocurra este año. La primera generación de este tipo de test, como es el caso del Precivity AD-Bloodtest, se están usando en EEUU para valorar el nivel de amiloides pero tiene unos resultados que no son tan buenos como los obtenidos con el PET y el líquido cefalorraquídeo. Además, la metodología está muy limitada porque se trata de nuevas tecnologías que no están disponibles en los hospitales y hace difícil su realización a nivel general.